Siento una llama dentro del
fatuo corazón, callado cruzo y sueño, perdido en el rincón; detrás de mí, está
el fuego…Sé que alimentas el odio y lo rellenas de cólera y escarcha de ira…
¡No muevas los hilos de las tinieblas!...porque sé que gobiernas a los títeres
sin cabeza…del mundo.
¡Oíd, pueblo! ¡Oíd la
Muerte! que llega... ¡Cerrad, cerradlo todo!...Apagad las luces,
¡escondeos!...Llega y llega matando. ¡No le abráis!...Os conoce. Conoce
vuestras caras y nombres, a vuestras mujeres e hijos… ¿Dejaos morir? ¿Para
qué?... ¡Huid! ¡Huid presto!...El escape es la salida…Ya viene…Ya la
oigo…Schusssss ¡escuchad! ¿La oís conmigo?...No os mováis y se irá. Que nadie
hable ni respire… ¡Que callen el llanto de aquel niño! o ella…lo callará. Ya se
marchó…Pero volverá…algún día…y nadie podrá detenerla.
Nombre del autor: Amparo
Montejano Sampedro.
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