No pienso
abrir los ojos. Estoy solo en esta maldita ciudad, en este podrido piso.
El resto de
mis sentidos me dicen que son las tantas de la madrugada. No. No abriré los
ojos hasta que la razón pueda dilucidar quién leches está tocando mis tobillos
tratando de despertarme.
Nombre:
Rafael Jiménez Ontanilla.
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